Antonio Suaréz Weise
La obra titulada Illimani Santo, del fotógrafo Tony Suárez, tiene 66 imágenes registradas en los últimos años. Para el alcalde Luis Revilla, quien presentó la obra, es un homenaje a la bella montaña, un símbolo que identifica a todos los paceños.
La presentación se realizó en el Hotel Casa Grande de la zona Sur, oportunidad en la que el Alcalde ratificó que, la obra es un gran trabajo maravilloso con las imágenes del experimentado fotógrafo y con textos del poeta Juan Carlos Orihuela.
“Con toda seguridad –el libro– refleja la manera en la que, nosotros sin ser artistas, podríamos también expresar la forma en la que observamos al Illimani”, dijo la autoridad edil. El texto fue impreso en formato grande, mide 60 centímetros por 50 centímetros e incluye 66 fotografías únicas del nevado, la presentación del texto fue escrita por el artista Roberto Valcárcel.
Respecto a la propuesta para que la montaña, considerada uno de los símbolos de la ciudad de La Paz, sea promovida para que se encuentre entre las 10 montañas más bellas del mundo, Revilla aseveró que, “por supuesto se puede trabajar junto al autor y con todos los que quieren hacerlo”.
Illimani Santo es una publicación de lujo y con una edición limitada de 500 copias, las 66 imágenes fueron escogidas entre 500 fotografías del Illimani que fueron registradas en varios años.
El experimentado fotógrafo Tony Suárez señaló: “Mi pasión y asombro por el Illimani santo, comenzó hace varios años cuando retornaba a La Paz de unas vacaciones en Nueva York, recuerdo que al salir de un edificio en Sopocachi me encontré con un haz de luz rodeando sus faldas, fue una bella sorpresa y un fenómeno único”, afirmó Suárez.
El fotógrafo reveló que cada día observa al Illimani y que desde donde se encuentre intenta fotografiarlo, de esa manera fue colectando imágenes del gran nevado que tiene más de 6 mil metros de altitud sobre el nivel del mar.
Sus tres picos visibles desde la ciudad lo convirtieron en un símbolo de La Paz, pese a que tiene cinco cumbres, dos de ellas no son muy notorias. Una serie de escaladores coronaron su cima por tratarse de una de las más bellas montañas de la Cordillera Real.