“El espacio público es de las personas, no de los vehículos”
(María Eva Jokanovich, Gerente General de Planificación del Ente de la Movilidad de Rosario)
La ciudad de Rosario fue la primera ciudad en Argentina en implementar un circuito recreativo permanente, libre de automóviles y motos, donde la gente puede circular en bicicletas de manera segura lo que se traduce en beneficio para su salud. Transportarse en bicicleta es una realidad hoy en día en esta ciudad, así lo confirmó María Eva Jokanovich, experta argentina en planificación urbana que visitó recientemente La Paz.
Jokanovic, es Gerente General de Planificación del Ente de la Movilidad de Rosario Argentina y participó de la Mesa de Transporte que se llevó a cabo del 27 al 28 de junio, denominada “Concepción, desarrollo y ejecución de los Planes de Movilidad Urbana”, organizada por el proyecto Aire Limpio, con el apoyo de la cooperación Suiza para el Desarrollo y la Asociación de Municipalidades de Bolivia (AMB), que contó con la presencia de concejales y personal técnico del municipio paceño.
El uso de ciclovías, como medio de transporte en las ciudades es cada vez más popular, pero para ello, se requiere contar no sólo con la infraestructura adecuada para garantizar la seguridad del ciclista, sino además, con un ordenamiento y cultura ciudadana de respeto. Rosario cuenta con ambos elementos, constituyéndose en un ejemplo para las ciudades de América del Sur.
Al cambiar la matriz conceptual y la dinámica de la movilidad urbana en una ciudad, es posible mejorar la calidad de vida. Algunas ciudades ya han implementado este sistema, por ejemplo, la ciudad de Bogotá tiene el récord de ciclovías de América Latina con 354 kilómetros construidos, mientras que Río de Janeiro (Brasil) tiene 282 kilómetros y Buenos Aires 94 kilómetros. Rosario, es la ciudad argentina con más ciclovías y bicisendas por habitante en el país argentino. Un total de 43 kilómetros para 1.100.000 habitantes. Los estudios indican que el 8% de los traslados se hacen en bici.
Una ciclovía es parte de la infraestructura pública u otras áreas destinadas de forma exclusiva o compartida para la circulación de bicicletas. La ciclovía puede ser cualquier carril de una vía, señalizado apropiadamente para este propósito o puede ser también una vía independiente para el tránsito exclusivo de bicicletas.
Las políticas de movilidad urbana de Rosario, integran elementos para promover la convivencia, el encuentro, el esparcimiento y la vida saludable, con sistemas de “bicicletas públicas” (proyecto de próxima implementación) “calles recreativas”, donde se promueve la actividad física, las expresiones culturales, y sobre todo la coexistencia armoniosa de la ciudadanía. Según Jokanovic “El espacio público es de las personas, no de los vehículos”.
La experiencia de Rosario forma parte de la Red de Ciclovías Recreativas Unidas de las Américas, iniciativa que llevan adelante varias ciudades del continente americano promoviendo un estilo de vida más saludable.